El CGE y ANENVAC instan a no bajar la guardia con la viruela del mono, piden potenciar la vacunación en los grupos de riesgo y lanzan una infografía actualizada con la vía de administración intradérmica de la vacuna

El Consejo General de Enfermería y la Asociación Nacional de Enfermería y Vacunas (ANENVAC) instan a no bajar la guardia contra la viruela del mono y recuerdan la importancia de que los grupos de riesgo se vacunen en toda España.

Aunque tal y como ha expresado la Organización Mundial de la Salud (OMS) hay signos de que la incidencia mundial comienza a remitir, la institución que regula la profesión de los más de 330.000 enfermeras y enfermeros de España y ANENVAC han lanzado un mensaje de prudencia y han pedido no mirar hacia otro lado ante los contagios.

“Según las cifras mundiales, existen índices de mejora, pero hay que ser prudentes. España ha sido uno de los países más golpeados por la viruela del mono, pero, una vez más, la población y los grupos de riesgo estimados para la vacunación han respondido de manera ejemplar y han agotado las dosis disponibles a medida que llegaban a nuestro país. Las enfermeras se pusieron al frente de esta campaña, que comenzó con unas indicaciones por parte del Ministerio de Sanidad y se modificó más adelante para tener más dosis disponibles”, afirma Florentino Pérez Raya, presidente del Consejo General de Enfermería.

La vacuna, que empezó a administrarse de forma subcutánea (0,5 ml), pasó semanas después a hacerse de manera intradérmica con una dosis menor (0,1 ml) tras estudios que demostraron incluso una mayor efectividad, para optimizar el escaso número de dosis que llegaban a España. Esta vía no es la que se utiliza habitualmente para administrar vacunas, por lo que en muchas ocasiones ha sido necesaria una actualización de conocimientos.

Con el objetivo de ayudar y refrescar estos conocimientos, ambas instituciones han lanzado una infografía y un vídeo animado con todos los detalles de la vacuna contra la viruela del mono: conservación, pauta, paso a paso de la administración intradérmica y personas a las que va dirigida en estos momentos. “Para nosotros es fundamental que las enfermeras estén siempre entrenadas y actualizadas. Con la llegada a España de la viruela del mono, la prioridad de las autoridades sanitarias fue contener la propagación y evitar una expansión que pusiese en jaque la sanidad como lo había hecho hace dos años el COVID-19. Debemos seguir trabajando para proteger a la población de esta y otras enfermedades y la vacunación ha demostrado siempre ser la mejor barrera que tenemos para evitar futuras epidemias”, apunta Pérez Raya.

Por su parte, José Antonio Forcada, presidente de ANENVAC subraya la necesidad de estos materiales porque “es una técnica (administración intradérmica) que se utiliza en pocas ocasiones y para una correcta aplicación en epidermis y que se forme la ampolla es necesario un entrenamiento y habilidad que en ocasiones se puede haber perdido por la falta de práctica. Si en lugar de aplicar el preparado vacunal en la epidermis, se aplica en la dermis, el efecto deseado se puede distorsionar y no ser el mismo”.

Asimismo, destaca la importancia de vacunarse: “Si se indica la vacunación, es muy importante hacerlo, pues es la manera más eficaz de cortar la cadena de transmisión y colaborar en el control del brote que nos ocupa en la actualidad”. “La vacuna es segura y efectiva y las posibles reacciones adversas son principalmente locales, leves y autolimitadas”, concluye Forcada.