El Ilustre Colegio Oficial de Enfermería de Jaén exige al SAS que extreme la vigilancia y la revisión de todo el material de protección que entrega a los sanitarios. Los profesionales de enfermería de Jaén, el colectivo sanitario más numeroso y más cercano a los pacientes, han recibido por segunda vez mascarillas que no cumplen con la normativa ni protegen correctamente. En esta ocasión han sido enfermeras del Hospital Universitario de Jaén las que han puesto en conocimiento de la institución colegial el problema detectado con las mascarillas del tipo FFP2, Modelos: Élite Respirator EB09.049 y KN95 MASK (Purgivor). “Se ha detectado que no cumplen la normativa UNE EN 149:2001 A1 2010 por lo que no deben utilizarse para su protección de la COVID-19”, informa el presidente, José Francisco Lendínez.
Hace unos días ocurrió un hecho similar, en esta ocasión con las mascarillas FFP2, Garry Galaxy N-95. “Ya está bien. No pueden tenernos desprotegidos, la seguridad de los sanitarios es lo más básico y esencial”, apunta Lendínez. Igualmente recuerda la insuficiencia de test para detectar coronavirus entre los sanitarios. “Urge poner a disposición de los profesionales que se juegan cada día su salud y la de sus familias, también la de toda la población, test fiables, rápidos y efectivos”, apunta el presidente.
En este sentido, desde el Consejo Andaluz de Enfermería se ha interpuesto queja ante el Defensor del Pueblo Andaluz, por acuerdo unánime del Pleno de esta corporación, denunciando la situación que atraviesan las enfermeras y enfermeros que prestan sus servicios en los centros sanitarios de Andalucía por la falta de material de protección adecuado en la lucha contra el COVID-19, lo cual pone en riesgo tanto su salud como su propia vida, así como la de sus pacientes e incluso la de sus familiares; todo ello como resultado de la falta de previsión y la improvisación del Gobierno y la Junta en la gestión de la crisis sanitaria ocasionada por el COVID-19. El CAE solicita que se investiguen las actuaciones, medidas adoptadas y acciones de la Delegación del Gobierno en la Comunidad Autónoma de Andalucía, la Junta y su Consejería de Salud y Familias, para esclarecer los hechos y circunstancias que han propiciado que hayamos alcanzado en nuestra región la cifra de 28,3% de contagios de profesionales sanitarios, muy por encima de la ya alarmante media de España del 16%, superándose exponencialmente el índice de contagios de sanitarios registrados a nivel internacional (China, Italia). “Este índice de contagios entre sanitarios ha sido vinculado por la propia Dirección del Centro de Emergencias y Alertas Sanitarias a la escasez de equipos de protección, y evidencia la situación a la que se están enfrentando los profesionales en sus centros de trabajo ante la falta de recursos y medios materiales y humanos”, informa Lendínez.
Ya en marzo los Servicios Jurídicos del Ilustre Colegio Oficial de Enfermería de Jaén presentaron una demanda judicial por vulneración del derecho fundamental a la integridad física, previsto en el artículo 15 de la Constitución Española, y en reclamación de equipos de protección individual completos para el personal sanitario y de enfermería ante el Juzgado de lo Social de Jaén. Del mismo modo, la institución colegial formuló una denuncia ante la Inspección de Trabajo contra el Servicio Andaluz de Salud (SAS) por el mismo motivo, es decir, por no facilitar equipos de protección individual homologados adecuados y suficientes al personal de enfermería.