El Consejo General de Enfermería, a través de su Instituto de Investigación Enfermera, publica un nuevo informe de Recursos Humanos en Enfermería, correspondiente al año 2020.
En él se hace una radiografía exhaustiva de la situación de la profesión en España en relación con la enfermería a nivel mundial, de los países más desarrollados (OCDE), a nivel de la Unión Europea, pero también con las diferencias entre comunidades autónomas o con otras profesiones sanitarias. Por primera vez, se incluyen también datos sobre los sectores público y privado, así como el desempleo en la profesión, los datos de enfermeros especialistas o el número de egresados en las distintas Facultades de Enfermería.
Como explica José Luis Cobos, coordinador de este informe y vicesecretario general del Consejo General de Enfermería, “hemos querido realizar un análisis descriptivo y comparativo, a nivel nacional e internacional, de la situación actual de la profesión enfermera en España, así como su evolución durante el periodo 2014-2020, de tal forma que su información y las conclusiones a las que hemos llegado sirvan para el estudio de la estructura, composición y evolución de la profesión enfermera en España. No obstante, hemos de tener en cuenta y seguir profundizando en los análisis cualitativos sobre los diferentes perfiles de la Enfermería, así como las necesidades de la población, para abordar las políticas de recursos humanos, que permitan una atención de calidad y seguridad en nuestro Sistema Sanitario”.
En España
Dentro de nuestras fronteras, las diferencias también son muy acusadas. Según los datos del INE de 2019, que recoge el informe, la ratio nacional es de 5,6 enfermeras por cada 1.000 habitantes. Tal y como subraya Florentino Pérez Raya, presidente del Consejo General de Enfermería “si observamos los datos desglosados por comunidades autónomas encontramos que existen grandes contrastes entre todas ellas, un dato que pone en evidencia el principio de equidad en el que supuestamente se basa el Sistema Nacional de Salud y tiene una clara repercusión en la pandemia de COVID-19”.
Como en años anteriores, Navarra es la comunidad autónoma que mayor número de enfermeras/os tiene con 8,6 enfermeros no jubilados /1.000 hab. Siendo la única comunidad autónoma que supera la media de la Unión Europea.
El contraste queda puesto de manifiesto cuando lo comparamos con el dato de Galicia (5,19 enfermeros no jubilados /1.000 habitantes), Andalucía (5 enfermeros no jubilados /1.000 habitantes) o Murcia (4,59 enfermeros no jubilados /1.000 habitantes), las regiones con las menores ratios.
Por encima de la media nacional, a Navarra le siguen, con mucha diferencia 3 comunidades, País Vasco (7,69 enfermeras/os no jubiladas / 1.000 habitantes), Castilla y León (7,07 enfermeras/os no jubilados / 1.000 habitantes) y Extremadura (6,92 enfermeras/os no jubiladas / 1.000 habitantes). Asimismo, Melilla se sitúa con 7,14 enfermeras/os no jubiladas / 1.000 habitantes.
Público/privado
Según los datos del Ministerio de Sanidad de 2018, en España hay un total de 256.333 enfermeras/os trabajando tanto en el sector público como en el privado, lo que supone una ratio de 5,5 enfermeras/os por cada 1.000 habitantes.
En base a esta misma fuente, en el SNS, en el año 2017 trabajaban 175.594 enfermeras/os en el ámbito público. En los centros de salud y en consultorios de Atención Primaria lo hacían 29.662 (0,6 por 1.000 habitantes) y en los hospitales del SNS 141.132 (3,0 por cada 1.000 habitantes). En los servicios de urgencias y emergencias 112/061 trabajaban 2.964 enfermeras/os.
En el ámbito privado, según el informe del Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (IDIS) se estima que, el año 2017, había 70.078 enfermeras/os trabajando en el sector privado: 29.942 en el ámbito hospitalario y 45.136 en el extrahospitalario.
A nivel internacional
En el ámbito internacional el informe analiza distintas fuentes (OMS, OCDE, Eurostat) para conocer la situación de la enfermería española con respecto a otros países. Así, España se encuentra en la posición número 61 del ranking mundial según la OMS, con una ratio de 5,73 enfermeras por cada 1.000 habitantes, mientras que los médicos se posicionan en el número 26, lo que supone que se está tres veces mejor posicionada en lo que se refiere a médicos que a enfermeros. De hecho, España es uno de los países con menos enfermeras/os por cada médico del mundo, situándose en la posición número 142 de los 193 países cuyos datos se disponen a nivel mundial, con una ratio de 1,48 enfermeras por cada médico.
Por su parte, la OCDE sitúa a España en el cuadrante de “muchos médicos/pocas enfermeras”, ya que comparado con la media de los 35 países de este entorno la media de médicos por 1.000 habitantes es superior (3,9 vs 3,5) mientras que la ratio de enfermeras es notablemente inferior (5.7 vs 8.9).
Si consideramos sólo el entorno europeo (Eurostat), España se encuentra por debajo de la media de los países de la UE, obteniendo la posición 12 de 30 en menor ratio de enfermeras profesionales, superando solamente a los países de Europa del Este. La posición es aún peor, cayendo hasta el puesto 7, en menor ratio de enfermeras totales de atención directa (profesionales y asociadas).
En función de las distintas fuentes consultadas por los autores del informe, la media de la ratio de enfermeras por habitantes oscila entre las 7,68 de Eurostat, las 8,18 de la OCDE y las 8,77 de la OMS, mientras que España cuenta con una ratio de 6,02 enfermeras no jubiladas por cada 1.000 habitantes.
Necesidades de enfermeras
Sobre la base de estos datos, en términos globales podríamos decir que en España se necesitarían actualmente 110.000 enfermeras más para alcanzar las medias de las ratios europeos. Sin embargo, en el informe también se detalla la estimación de necesidades de enfermeras para llegar a la ratio de la Unión Europea a medio y largo plazo. De tal forma que en 2.023 esa cifra se situaría en las 108.000 enfermeras, llegando a las 127.000 en 2030, si se mantienen el crecimiento demográfico, la formación y el empleo enfermero actual.
Otros datos
En el informe también se analizan otras cifras, como el desempleo en la profesión. Así, según los datos los “informes mensuales del mercado de trabajo de titulados universitarios”, del servicio público de empleo estatal (SEPE), la tasa de paro se sitúa de media en el 1,33%. Pese a estos buenos datos de empleo “hablamos de que los contratos que se producen en enfermería son estacionales e inestables, respondiendo a los rasgos de precariedad, siendo temporales y con jornadas parciales, lo que provoca una gran inseguridad laboral entre las enfermeras, pese a contar con empleo”, destaca el presidente de las enfermeras españolas.
Actualmente, el grado de Enfermería puede cursarse en 61 universidades y 92 centros adscritos, siendo la cuarta carrera con la nota de acceso más alta (9,39). Sin embargo, “el número actual de egresados en enfermería por año no permite el aumento necesario para alcanzar la ratio media en Europa, teniendo en cuenta la tasa de reposición debido a las jubilaciones, así como a los posibles abandonos de la profesión”, subraya Pérez Raya.
Además, según consta en el Ministerio de Universidades, a fecha de noviembre de 2020, se han concedido un total de 48.541 títulos para el total de las especialidades de Enfermería, según el catálogo vigente. Anualmente, por el acceso a la formación sanitaria especializada se ha ido incrementado en los últimos años hasta alcanzar las casi 1.500 plazas para el sistema de formación EIR. Tal y como señala el presidente de las enfermeras españolas, “la oferta de plazas de enfermeras especialistas trae consigo beneficios innegables para la profesión enfermera, el sistema de salud y la población. Sin embargo, esta debe adaptarse a las necesidades del sistema sanitario español, por lo cual, se debe realizar una ampliación de la especialización para las enfermeras españolas, y con ello, garantizar la cobertura de salud y seguridad de la población”, concluye el presidente del CGE.