La condena, al margen del delito de atentado, vuelve a establecer la orden de alejamiento del agresor, además de abonar los daños y perjuicios y las costas procesales
Los hechos sucedieron en un centro de salud de la provincia, cuando un usuario de la Sanidad Pública agredió físicamente al enfermero. Según la sentencia, “en un estado de gran alteración, entrando en la sala de curas donde estaba siendo atendida su hija, y con un gran desprecio hacia la autoridad, se dirigió hacia el enfermero que vestía uniforme de sanitario, y a quien propinó fuertes golpes en el pecho y en los hombros además de intentar propinar un puñetazo en la cara sin conseguirlo”. Otra enfermera, que intentó mediar para que el agresor depusiera su actitud, también recibió un puñetazo en la mano. A consecuencia de estos hechos, ambos sufrieron lesiones de diferente consideración.
Los enfermeros, bajo la defensa de la Asesoría Jurídica del Colegio de Enfermería de Jaén, han conseguido que la Justicia condene por estos hechos al agresor y la sentencia establece para el autor de dos delitos leves de lesiones una pena por cada uno de ellos de un mes de multa, a razón de dos euros diarios con aplicación del artículo 53 del Código Penal en caso de impago, costas incluidas de la acusación particular y la prohibición de aproximarse a un radio de 300 metros a los profesionales de la enfermería, por un plazo de un año y seis meses.
Desde la institución colegial muestran su satisfacción por esta sentencia y recuerdan a los enfermeros que no bajen la guardia y denuncien siempre cualquier tipo de agresión, ya sea física o verbal.
Por último, el presidente del Colegio, José Francisco Lendínez Cobo, incide en la necesidad de aumenta el número de enfermeras en Atención Primaria y Especializada: “Es esencial, básico, la situación de la enfermería en nuestra provincia es lamentable en un contexto normal, ya ante esta pandemia de Covid19 los profesionales están desbordados, frustrados, cansados”, apunta.