El Colegio de Enfermería de Jaén (ICOEJ), al igual que el Consejo Andaluz de Enfermería (CAE), instan a la vuelta a la atención presencial de los pacientes en la sanidad.

Desde la institución colegial, y ante la elaboración por parte del SAS de la Guía Técnica para consulta de Atención Telefónica para la que se pedía el aval de la profesión, reiteran su rechazo a este documento.

“En su momento entendimos las necesidades y los nuevos requerimientos provocadas por la COVID-19, así, la atención presencial quedaba cada vez más relegada en favor de la atención telefónica, un hecho que denuncian los ciudadanos”, manifiesta el presidente del ICOEJ, José Francisco Lendínez Cobo.

Ante esta situación y con la distribución de este documento en los centros de salud, la enfermería ha enviado una carta al Consejero de Salud y Familias de la Junta de Andalucía, Jesús Aguirre, mostrando su rechazo a la implantación de la Guía Técnica para Consulta de Atención Telefónica.

“La posición de la enfermería se resume en esta máxima: Atención presencial sí, atención telefónica, una herramienta más”, expone Lendínez. “Valoramos el empleo de las herramientas tecnológicas en las relaciones entre ciudadanos y profesionales, pero en ningún caso, puede estar ni al mismo nivel, ni por encima de la atención y el contacto presencial con los profesionales de la salud”, añade.

Por su parte, el CAE no ha participado en la elaboración del documento y la presentación ha consistido en solicitar su aceptación y su aval, tal y como ha sido redactado por el propio Servicio Andaluz de Salud.

El documento elaborado por el Servicio Andaluz de Salud con el nombre de Guía Técnica para la consulta de Atención Telefónica, convierte a la atención telefónica como predominante en las relaciones con los usuarios de los centros de atención primaria. Instaura un sistema que dificulta la accesibilidad de los ciudadanos a la atención primaria, así a unos profesionales del sistema sanitario se puede acceder directamente tanto mediante atención telefónica o presencial, mientras en el caso de otros se dificulta el acceso. En la guía se ponen de funcionamiento una serie de circuitos en los que unos profesionales se convierten en el control de acceso a otros, con lo que se dificulta la accesibilidad y la agilidad en la atención.

“La aplicación del documento se hace sin la pertinente memoria de recursos económicos y humanos. En nuestro caso, los profesionales de Enfermería tendremos nuevas tareas con los mismos recursos y espacios”, declara el presidente.

La posición del Consejo Andaluz de Enfermería pasa por no avalar el documento y demandar y solicitar del SAS la atención presencial de todas las categorías profesionales que integran el sistema sanitario de salud en las mismas condiciones para todos.