El CGE agradece la concesión de la Gran Cruz de la Orden Civil de Sanidad, pero recuerda que el sistema está herido de gravedad: “El mayor premio sería que apuesten de verdad por la profesión”

El Consejo General de Enfermería agradece enormemente al Gobierno liderado por Pedro Sánchez la concesión de la Gran Cruz de la Orden Civil de Sanidad tras dos años durísimos de pandemia, en los que las enfermeras han dado el cien por cien para luchar contra el virus, que se ha cobrado más de 100.000 vidas en España.

Un reconocimiento que el presidente de la institución, Florentino Pérez Raya, asegura que es para todas y cada una de las más de 325.000 enfermeras y enfermeros del país. “Es un orgullo como representante de la profesión recibir este reconocimiento, que, sin ninguna duda, es de todos y cada uno de los enfermeros y enfermeras de nuestro país. Una distinción que premia la labor encomiable realizada durante uno de los momentos sanitarios más difíciles de nuestra historia. Sin ninguna duda, me gustaría reiterar que cada uno de los milímetros que tiene esta medalla es de todos y todas mis compañeras”, afirma Florentino Pérez Raya, presidente del Consejo General de Enfermería.

En este sentido, Pérez Raya recuerda cómo las enfermeras se pusieron al frente de los cuidados en un momento complicadísimo, en el que faltaba incluso material de protección suficiente para evitar el contagio del COVID-19. “Las enfermeras no dudamos ni un momento en que la solución y la lucha contra el coronavirus pasaba por nuestras manos y por la de todos los sanitarios. Los aplausos a las ocho fueron uno de los grandes reconocimientos que se nos hicieron durante los meses más duros. Ahora, dos años después, recibir la Gran Cruz de la Orden Civil de Sanidad, la máxima orden civil española que se concede, es motivo de honor y satisfacción para todos y todas”, apunta el presidente de las enfermeras.

200.000 mascarillas

El Consejo General de Enfermería se puso a disposición de todos los profesionales desde el primer momento para apoyar, ayudar y asesorar en todo lo relacionado con la pandemia. Ante la escasez de material, la institución repartió más de 200.000 mascarillas FFP2 en hospitales de toda España, así como 5.000 monos EPI. Con el objetivo de informar, formar y explicar la nueva realidad a la que se enfrentaba el país, se lanzó una campaña mediática a través de infografías, vídeos animados y tutoriales en los que se aclaraban asuntos cómo la desinfección de los domicilios, el lavado de manos, la atención a pacientes infectados en el domicilio u otros temas como hábitos saludables o la manera de afrontar la desescalada tras el confinamiento.

“Nuestra posición desde el principio fue estar al lado de los profesionales y de la población general. Las enfermeras y enfermeros estaban dejándose la piel para salvar vidas y desde la institución que los representa no podíamos mirar para otro lado”, subraya Pérez Raya.

Además de al Consejo General de Enfermería, el Ejecutivo también ha concedido, mediante Real Decreto, la Gran Cruz al Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos y al Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos. Pérez Raya ha querido dar la enhorabuena a ambas instituciones: “No se entiende el trabajo de una profesión sanitaria sin el resto. Todos y todas, médicos, farmacéuticos, enfermeros y resto de profesionales, somos un equipo multidisciplinar sin el que el Sistema Nacional de Salud no tendría sentido. Es un placer para nosotros recoger este reconocimiento junto a médicos y farmacéuticos. Un reconocimiento que, de nuestra parte, también dedicamos a otros trabajadores en el ámbito sanitario como los técnicos en cuidados auxiliares de enfermería, psicólogos, fisioterapeutas, personal de mantenimiento, limpieza… que también estuvieron en los hospitales, centros de salud y sociosanitarios haciendo frente al virus”.

Apostar por la profesión

Por último, el presidente de las enfermeras también ha querido recordar que, además de este tipo de reconocimientos, el Gobierno central y los autonómicos deben apostar realmente por las enfermeras y ser conscientes de las necesidades a las que se enfrenta la profesión en la actualidad. “Estamos a la cola en las ratios de la Unión Europea en cuanto a enfermeras se refiere. Nos enorgullece que se nos condecore con la Gran Cruz de la Orden Civil de Sanidad, pero las administraciones también deben asegurarse de que el sistema funciona. El mayor premio sería que se apostase por la profesión. Los sanitarios están exhaustos tras estos dos años y los anuncios de despidos en las comunidades autónomas no ayudan a mejorar una Sanidad herida de gravedad. Se nos debe reconocer la misma categoría profesional que ha otras titulaciones dentro del Grupo A de la administración pública, mejorar las ratios de enfermera por población, contratar plantillas estables, aumentar las plazas de enfermeras especialistas para dar una atención de mayor calidad y reforzar la desbordada Atención Primaria. Urge abordar estos temas si no queremos tener que lamentarnos después”, concluye Pérez Raya