Análisis examen EIR 2020 (27/3/2021)

examen eir 2020

Estimado/a Colegiado/a:

Tras el análisis del examen EIR 2020, celebrado el pasado sábado 27 de marzo de 2021, correspondiente a la convocatoria de 2020, en nuestra opinión podemos extraer las siguientes conclusiones respecto al mismo.

1º. Examen con un elevado grado de dificultad y muy exigente

Como era de prever se ha tratado de un examen difícil, siguiendo la tónica de las últimas convocatorias, en una escala de 0 a 10, en la que 0 representa lo más fácil posible y el 10 el máximo nivel de dificultad, le otorgaríamos una puntuación en torno a 8, esto viene a poner de manifiesto la tendencia marcada ya, el año pasado y que estimamos va a ser la línea a seguir en los años venideros, un examen más difícil, complejo y exigente enfocado a la finalidad última de ser discriminatorio y eliminatorio, que marque las diferencias en las puntuaciones obtenidas en la prueba.

Resulta interesante el incremento en el número de preguntas relacionadas con imágenes, si el año pasado eran 5, este año se han elevado a 8 preguntas relacionadas con imágenes, aunque es de reseñar que el grado de dificultad de las mismas es muy variable, algunas con un grado de dificultad prácticamente nulo caso de la pregunta de “la maniobra de Leopold”, otras que perfectamente podían confundir al aspirante, caso de la Cánula de Berman, y otras que estimamos de gran dificultad, caso de las preguntas de histología y ecografía, disciplina ésta en que desgraciadamente, nuestra profesión sigue adoleciendo de formación pregrado, aunque afortunadamente cada vez menos.

De lo anterior, se puede desprender que, puesto que en un primer momento fue la equiparación en el número de preguntas respecto al examen MIR, ahora siga esta tendencia y el número de preguntas relacionadas con imágenes llegue a la cifra de 15 como sucede en el citado examen, lógico por otra parte si tenemos en cuenta que en ambos casos estamos hablando de 2 Grados, sin distinción en la titulación según la legislación vigente, igualmente de esperar y un anhelo por nuestra parte, esperar que esta equiparación se ponga de manifiesto también en el número de plazas ofertadas tanto para unos como para otros, además del desarrollo, regulación y realización de pruebas de acceso por vía extraordinaria a las especialidades que aún quedan por desarrollar, como son Enfermería Familiar y Comunitaria y Enfermería Médico-Quirúrgica.

2º. Elevada dificultad de algunas preguntas

Como ya venimos diciendo, la dificultad del examen se puede categorizar como medio-alta, y seguro que esto se pondrá de manifiesto con la publicación de las notas, donde con certeza vamos a observar notas más bajas que en los años anteriores. Hay bastantes preguntas que el sentido común indicaba “dejárselas en blanco” porque dado su nivel de dificultad, era arriesgarse a contestar entre 4 posibles respuestas, sin tener ninguna clara, con lo cual el examen se convierte en un juego de azar, siendo lo más posible errar en la contestación y al finalizar el examen, habernos “cargado de negativos”, de aquí la importancia de tener una formación adecuada en la realización de exámenes tipo test, empleado en todo momento el método de doble vuelta, conociendo nuestra autofiabilidad y manteniendo en todo momento la fiabilidad y calma necesaria para salir airosos de este examen, de cualquier manera, el examen ya está realizado, y lo hecho, hecho está, y bueno hay que ser positivos, ya que el examen ha sido el mismo para todos, y seguro que todos “hemos disfrutado” de estas preguntas imposibles, lo que sí marca la diferencia es el haberlas contestado o haber sido lo suficientemente fríos, como para dejárselas en blanco, y que no nos penalicen.

Cualquier examen tipo test es así, el EIR no constituye una excepción, siempre hay preguntas que nos van a hacer dudas de lo fáciles que nos resultan, preguntas que nos van a hacer pensar, y otras que nos van a hacer “sudar la camiseta”, y claro está alguna que la mires por donde la mires, va a resultar imposible que la contestes correctamente, el saber identificar estas últimas y dejárselas en blanco, constituye la llave del éxito en un examen tipo test en la inmensa mayoría de las ocasiones, y lo que nunca hemos de perder de vista es que no hay que contestar todas las preguntas, nadie en ninguna oposición ha contestado todas las preguntas y no ha errado en ninguna, por tanto nosotros no vamos a ser los pioneros. La solución no es contestar mucho, es contestar mucho correctamente y por supuesto no cargarse de negativos.

3º. Conocimientos actualizados y basados en la evidencia

Otra vez más, y quizá que esta convocatoria haya sido la más exigente a este respecto, nos ha puesto de manifiesto la necesidad de que no basta con tener conocimientos de toda la carrera de Enfermería, sino que, resulta determinante estar permanentemente actualizados conociendo los más actuales protocolos de actuación, Guías de Práctica Clínica (GPC), escalas de valoración, criterios diagnósticos…, como se ha evidenciado de forma categórica con la presencia de las 6 preguntas específicas de la COVID-19, cierto es que no representaban un alto grado de dificultad, pero sí ponían de manifiesto esta necesidad de actualización permanente.

4º. Peso de las asignaturas

Y, por último, cabe reseñar el peso específico de las asignaturas una vez más vemos como el peso de cada uno de los bloques se distribuye de la siguiente manera comunitaria/salud pública/epidemiología, ginecología-obstetricia, pediatría, investigación, nefrología, farmacología y oncología/hematología/cuidados paliativos. Aunque continuamos echando de menos que se pongan más preguntas relacionadas íntimamente con la enfermería, esperemos que en años venideros se haga realidad este aumento en el número de preguntas de enfermería, y así que constituya un examen más acorde con nuestros conocimientos y el posterior desarrollo profesional.

Como hemos dicho antes, y a modo de conclusión, en cualquier caso, alea jacta est, y que todas tengáis la mejor suerte del mundo, para que podáis obtener vuestro sueño y por lo que tan duramente habéis estado trabajando.

ANTONIO BARRANCO MARTOS

DEPARTAMENTO DE FORMACIÓN ICOEJ